Fundaciones en el Caribe Sur
¿Cómo Trabajar las Fundaciones de una Construcción en el Caribe Sur de Costa Rica para Evitar Problemas de Humedad?

Construir en el Caribe Sur de Costa Rica implica enfrentar desafíos específicos debido a su clima tropical húmedo, caracterizado por lluvias abundantes y suelos con alta retención de agua. Para evitar problemas de humedad en las fundaciones, es fundamental realizar un estudio geotécnico previo que determine la capacidad de carga del terreno y su nivel de drenaje. Optar por cimentaciones elevadas o zapatas corridas con un buen sistema de drenaje es clave para evitar el contacto directo con la humedad del suelo y prevenir filtraciones que puedan comprometer la estructura con el tiempo.
El diseño adecuado del sistema de drenaje es un aspecto crítico en este tipo de construcciones. Se recomienda la instalación de una base de grava y tuberías de drenaje perimetral para canalizar el agua de lluvia lejos de las fundaciones. Además, el uso de barreras antihumedad, como membranas impermeabilizantes y selladores en la cimentación, ayuda a proteger la estructura contra la absorción capilar. El concreto utilizado debe ser de alta resistencia y contar con aditivos hidrofóbicos que minimicen la absorción de agua, prolongando así la vida útil de la edificación.
Otro factor importante es la ventilación de la base de la construcción. En muchas edificaciones del Caribe, se opta por estructuras elevadas sobre pilotes o bases de concreto que permitan el flujo de aire por debajo del inmueble, reduciendo la acumulación de humedad y evitando problemas como moho, hongos y corrosión en materiales metálicos. Además, es recomendable emplear materiales resistentes a la humedad, como maderas tratadas, acero galvanizado y pinturas impermeabilizantes, que ayuden a mantener la integridad de la estructura a largo plazo.

Para garantizar el éxito de una construcción en esta región, es esencial trabajar con arquitectos e ingenieros que comprendan las condiciones climáticas del Caribe Sur de Costa Rica y apliquen soluciones constructivas adaptadas a este entorno. Implementar técnicas de cimentación adecuadas, reforzar el sistema de drenaje y utilizar materiales resistentes a la humedad no solo previene problemas estructurales, sino que también mejora la durabilidad y el confort de la vivienda. Siguiendo estos principios, es posible edificar con seguridad y eficiencia en un entorno desafiante, minimizando el impacto de la humedad y maximizando la calidad de la construcción.
